IGUALDAD
ENTRE CHICAS Y CHICOS
Aunque
las leyes de nuestro país contemplan de una manera explícita la
igualdad entre varones
y mujeres, sin embargo su implantación práctica requiere tiempo y
esfuerzo añadidos,
pues todavía podemos ver, tanto en el mundo escolar como fuera de
él,conductas
que denotan la pervivencia del sexismo. La mayoría de las veces
estos comportamientos
son producto de nuestros automatismos conductuales que, en gran medida,
son prerreflexivos y pueden, incluso, estar en contradicción con
nuestra creencias,
ya que el campo emocional, que es a la vez individual y social, es el
lugar de resistencia,
a veces inconsciente, a las transformaciones sociales.
Un
ejemplo claro de los diferentes mensajes que reciben chicas y chicos
respecto a los afectos
y a la sexualidad lo tenemos en los medios de comunicación: en las
revistas dirigidas
a jóvenes. Las dirigidas a las chicas cuentan con abundantes títulos
que en sus ejemplares
reúnen temas de moda y consejos sobre amor y sexo, mientras que para
los chicos
los temas estrella son de motor y videojuegos, con lo que se
reproduce el estereotipo
mencionado más arriba de que los asuntos amorosos y sexuales son más responsabilidad
de chicas que de chicos.
La
psicóloga norteamericana Kathy Miriam manifiesta que la cultura de
masas ha hipersexualizado
el cuerpo de las muchachas cada vez más jóvenes a través de la
imagen, la
cosmética y la cirugía, y que la mayor actividad sexual de las
jóvenes coexiste con coerción
sexual. Apoya esta última afirmación en resultados de entrevistas a
jóvenes universitarias
que, a pesar de su creencia en la igualdad de los sexos, no
calificaban ni siquiera
como abuso relaciones sexuales que describían como humillantes y en
las que no
faltaba en algunos casos el uso de la fuerza física y en las que las
conductas de una relación
heterosexual –movimientos y ruidos– tienen más que ver con
cálculos mentales de lo que
les agrada a los varones que con expresiones espontáneas de lo que a
ellas les gusta.
De ahí que concluya que hay un cambio en la cantidad de las
relaciones sexuales más
que en la calidad. No hay un incremento de la libertad de las
mujeres, sino diferentes
formas de negociar la sumisión, concluye Miriam.
VV.AA.
“Ni ogros ni princesas”, 2007
1.-
Indica en una frase cuál es el tema central del texto, propón un
título posible y analiza su estructura
(determina la introducción, el desarrollo y la conclusión).
2.-
¿En qué consiste la desigualdad de derechos entre chicos y chicas?
¿Cuáles serían, según tú,
algunas de las cosas que hacemos de manera cotidiana y qué son
actitudes claras de desigualdad
entre mujeres y hombres?
3.-
Escribe un resumen del texto.- Recuerda que un buen resumen debe:
- Recoger lo esencial, todo lo esencial pero sólo lo esencial
(eliminando, por ejemplo,
ideas
repetidas y ejemplos,).
- Ser
notablemente más corto que el texto original
- No
añadir ni deducir ideas que no estén en el texto.
-
Presentar las ideas de forma propia (“con tus palabras”) y
conectadas entre sí por
nexos.
- No
dejar partes del texto sin resumir.
- No
limitarse a copiar frases sueltas del texto.
- Estar bien redactado, y respetar las normas de ortografía,
acentuación y puntuación.
4.-
Escribe un texto argumentativo (de unas 10 líneas) expresando tu
opinión sobre la
necesidad
de avanzar en la efectiva igualdad entre hombres y mujeres (¿Qué
opinas de este tipo
del tema? ¿Conoces o has oído hablar de alguna situación de
desigualdad entre chicos y chicas
en tu entorno? ¿Crees que acabaremos en poco tiempo con la
desigualdad entre hombres
y mujeres a corto plazo? ¿Por qué o por qué no? ¿Cuál crees tú
que son las causas para
seguir manteniendo en nuestra sociedad la desigualdad de derechos
entre mujeres y hombres?¿Qué
opinas de la gente que está en contra de la igualdad de derechos
entre hombres
y mujeres? ¿Por qué?... )